Hubo una época, a mediados de los 80, cuando el thrash era la forma de metal más rápida, pesada y extrema. Dicho esto, un puñado de bandas tocaron un poco más fuerte y con más salvaje respecto a sus pares. Esos pocos elegidos, sin darse cuenta, llevaron el género hacia un estilo aún más brutal y ganó aceptación clandestina unos años más tarde: el death metal.
Sin embargo, antes de ese momento crítico, la banda de ultra-thrash Dark Angel se encontraba al borde de la devastación y la innovación. Demasiado rápido y ruidoso para algunos, asombroso e innovador para otros, Dark Angel lideró un camino espinoso y venenoso más allá de los riffs malvados y los ritmos vertiginosos iniciados por Slayer. Y el baterista y compositor de Dark Angel, Gene Hoglan, estaba allí, en el centro de la tormenta, incluso entrenó a Dave Lombardo de Slayer sobre cómo tocar ritmos de blast beats en doble para el exitoso EP Haunting the Chapel.
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