El pueblo nam qom, pertenece, lingüísticamente, a la familia Guaycurú, autóctona de la región chaqueña. Los grupos guaycurúes fueron los primeros en poblar la región de “El Gran Chaco”, que se encuentra entre los límites de Argentina, Bolivia y Paraguay.
El autoglotónimo es qom, que en lengua toba significa «persona» o «gente» y hace referencia al pueblo en su conjunto.
En un principio, la denominación toba era usada por los guaraníes. Deriva de la palabra tová, que significa frentón. Se cree que se debe a la costumbre que tenían entonces, de raparse la parte de adelante del pelo.
Con el tiempo, este nombre fue incorporado por los propios tobas, aunque en períodos de conflictos bélicos, se utilizaba el término qom, que agrupa otros grupos guaicurúes australes, como los pilagá y los mocovíes.
Desde el siglo XVI comenzaron a habitar actuales provincias del norte y centro argentino. Entre ellas se encuentran: Salta. Chaco. Santiago del Estero. Formosa Buenos Aires. Santa Fe.
La lengua que habla este grupo se llama qom l'aqtac y està dentro del grupo de idiomas guaicurúes.
Los tobas eran un pueblo nómade: se desplazaban por zonas determinadas según las estaciones del año y los ciclos de vida de la flora y la fauna. Su economía se basaba en la caza, la pesca y la recolección.
La mínima unidad de organización social era la banda, conformada por varias familias. La unión de unas cuantas bandas aliadas por la lengua y arreglos matrimoniales, formaban las tribus, unidades políticas bajo el mando de un cacique.
El liderazgo podía heredarse solo si la persona demostraba tener habilidades destacadas para la caza y la pesca o la cura de enfermedades.
Sus integrantes vivían en habitaciones pequeñas hechas con troncos, recubiertas de paja. Además de abastecerse de alimentos, fabricaban objetos de cerámica, cestos y tejidos para uso interno.
Durante el verano, se limitaban a usar taparrabos. En los meses más fríos utilizaban ropas más complejas, diseñadas con fibras de caraguatá, cuero y algodón. Una de las prendas más utilizadas eran los ponchos.
os varones adultos utilizaban opaga, un tocado hecho con plumas y cuerdas de caraguatá. Además, todos los habitantes de la tribu vestían con onguaghachik, pulseras armadas con dientes y uñas de animales, semillas, plumas o caracoles.
El Censo Nacional de Población de 2010 en Argentina reveló la existencia de 126 967 personas que se autorreconocieron como tobas en todo el país, 35 544 de los cuales en el Gran Buenos Aires, 30 766 en la provincia del Chaco, 14 089 en la de Santa Fe, 13 475 en el interior de la provincia de Buenos Aires, 12 246 en la de Formosa, 4117 en la de Córdoba, 3845 en la Ciudad de Buenos Aires, 3427 en la provincia de Salta, 1630 en la de Entre Ríos, 947 en la de Santiago del Estero, 928 en la de Mendoza, 927 en la de Tucumán, 905 en la de Corrientes, 681 en la del Chubut, 419 en la de San Juan, 415 en la de San Luis, 384 en la de Río Negro, 326 en la de Misiones, 273 en la de Catamarca, 221 en la de Tierra del Fuego, 210 en la de La Rioja, 209 en la del Neuquén, 189 en la de La Pampa y 157 en la de Santa Cruz.